Con esa mítica frase que pronunció Jack Swigert (aunque la frase no era así exactamente) en la misión Apolo XIII que mandó la NASA a la luna, describió una situación peligrosa que podía llevar al desastre la misión, y por ende, a los astronautas.
Esa misma frase he pronunciado yo al salir del estadio esta tarde.
Ya llevamos tiempo o mejor dicho, partidos viendo que hay algo que no funciona en nuestro Efesé. Pese a que la clasificación se empeña en ponernos en lo mas alto, ni el juego ni los jugadores nos trasmiten, que ese liderazgo, tenga lógica.
Para analizar al equipo, hay que sopesara todos los factores. Entrenador nuevo, equipo nuevo, y afición… la misma del año pasado, bueno con algunos menos.
El equipo bajo mi punto de vista, tiene un problema fundamental, y es el CENTRO DEL CAMPO. Este problema fue el que nos condujo el año pasado al desastre mas absoluto. Si bien es cierto que en segunda B no tiene la importancia de las categorías superiores, por el escaso nivel técnico que tienen los jugadores que en esa división juega, los equipos que quieran aspirar al ascenso deben tener un centro del campo que domine la pelota, que lleve el peso del partido y que nutran de balones a los delanteros.
Ni Marcos Rodríguez, muy mal en este partido, ni Diego Segura controlaron esa parcela en todo el partido. Los balones llegan a la delantera con pases largos o con rechaces, nunca con jugadas trenzadas en el centro del campo.
Hoy hemos tirado 2 balones al palo, hemos tenido como 8 ocasiones de gol (la semana anterior en Cadiz solo tiramos una vez a puerta) pero pese a haber llegado mas la pelotita no entraba. Si hubiéramos dominado el partido, el encuentro habría quedado en tablas o lo hubiéramos ganado por el gol de penalti de Florián, pero no ganamos por el otro gran problema del equipo, las jugadas a balón parado. Casualmente se repite el patrón del año pasado, ni centro del campo, ni concentración en las jugadas a balón parado.
Cuando tenemos un córner en contra o una falta cerca del área vengo observando que nuestros jugadores no cubren al contrario con seriedad. Se permite que 2 tíos rematen solos dentro del área chica con demasiada asiduidad. Al equipo le hace falta trabajar mucho mas ese tipo de jugadas. El equipo debe implicarse en defender a balón parado, y no solo los defensas, el centro del campo debe ayudar en esa faceta. Además el portero Victor, por mucho record de imbatibilidad que haya batido, no trasmite seguridad a la defensa, y hoy por ejemplo no hizo nada en los 2 remates de cabeza que supusieron los 2 goles. Además sigue siendo excesivamente sacando la pelota para iniciar jugada, lo que hace que los delanteros les de tiempo a presionar la salida del balón, y cuando saca con el pie en largo, normalmente el balón termina o fuera de banda o poniendo en aprietos al compañero al que pasa, pues casi siempre el pase es deficiente.
Hoy tampoco ha sido el día de Perona, que pese a luchar todos los balones no pudo irse de ningún defensor, y peca en demasía en el taconazo.
Florián que es de largo, el mejor jugador de este equipo, cae demasiado a la banda a buscar balones, lo que deja la delantera y el área rival desierto de jugadores cartageneristas para rematar posibles balones que lleguen.
Tampoco Cañadas ni Oscar Rico tuvieron su día, diluyendose en el mediocre juego de sus compañeros.
En definitiva, el Arroyo nos arroyó (chiste fácil) con tan solo 2 disparos a puerta, y los 2 a balón parado, y nosotros solo pudimos meter 1 y de penalti.
Espero que la NASA (Pato-Reverte) encuentre la manera de salvar la misión (el ascenso a segunda división) , ya sea con fichajes para el centro del campo, o modificando el planteamiento de los encuentros con los jugadores que componen la plantilla. Tiempo hay, acaba de empezar el campeonato, y la situación de la clasificación la envidian la totalidad de los equipos que de este grupo, por lo que si las cosas se hacen bien, podemos reconducir al equipo, y dejarlo en la última jornada en el puesto que hoy ocupa.